Esta vez la Mare de Déu Dels Desamparats llegó sin prisas, ya que la última vez, el Covid la impidió quedarse. Paterna precisaba la presencia de la Madre para no sentirse huérfana. Necesitaba saludarla y decirle en directo: Salve, Reyna del cèl i la tèrra; Salve, Vèrge dels Desamparats; Salve, sempre adorada Patrona.
La Verge notó que estaba en Paterna, la Villa del "foc, la festa y la fe", porque a los gritos de bienvenida, a los vivas y las lágrimas, se unieron el estruendo y el humo de los cohetes. Es la acogida que los hijos de Paterna ofrecen a quienes aman de corazón. La recibieron a las puertas del Ayuntamiento bajo los acordes del Himno Nacional. La esperaban el Alcalde D. Juan Sagredo, el Rector de la Basílica de la Virgen, D. Juan Melchor y el párroco de san Pedro Apóstol D. Juan Antonio Cabanes. Tuvieron palabras de agradecimiento que emocionaron a los presentes y seguramente a la Virgen.
La multitud la formaban paterneros creyentes e incrédulos, gentes de clases sociales diferentes, de colores políticos distintos, de españoles de otras regiones, unidos todos por el gran amor a la Maredeueta. Unos y otros cantaron y bailaron ante la imagen como lo hacen a la Virgen de su tierra. Cerró la acogida el sonido de la dolçaina y el tabalet, que anunciaban el canto de unas "albaes", expresión del sentimiento del alma valenciana.
Dio comienzo al traslado procesional de la imagen hacia la Plaza del Pueblo, y al final del trayecto se notó que un profundo silencio y una emoción contenida reinaban entre los fieles. Los paterneros querían dar una sorpresa agradable a la Virgen y nada mejor que encontrarse con la imagen de su Hijo, el Santísimo Cristo de la Fe, su Patrón. La banda de música entonó las notas del himno de su Coronación, al tiempo que una salva de cohetes y aplausos les recibían.
Han faltado días y horas para poder llevar a cabo todos los actos de homenaje programados, y tanto el Ayuntamiento como la Iglesia han tenido que seleccionar los eventos porque otros muchos pueblos la esperan. Se le ofrecieron momentos de intimidad de la Virgen con los niños, en la "Misa d´Infants". Tiempos para que los jóvenes la dieran a conocer una de sus noches y compartir con ella una Vigilia. Turno para que los mayores y enfermos celebraran una Eucaristía y recibir el sacramento de la Unción de Enfermos. Ocasión para que visitara el cementerio y rezar un responso a los valencianos que allí descansan en la paz.
Costaba pensar en la despedida y programaron que lo mejor era reunir en la Plaza del Pueblo de Paterna a los pueblos y parroquias de la Vicaria 3 y juntos celebrar una solemne Eucaristía en la que ofrecieran la "Corona de Caridad" para los más desamparados.
Se dio el ¡¡ADEU!! a la imagen pero su presencia quedó viva en Paterna y en el corazón de los paterneros. "En tèrres valencianes la fe per Vos no mòr, i vostra Image Santa portem sempre en lo còr". Paterna, tras la venida de la Mare de Déu Dels Desamparats, ya no es la misma, ya no se siente huérfana. Ella ahora nos va a reconocer como el pueblo del "foc, la festa y la fe", el que le impuso la Medalla de Oro como lo más digno que un hijo puede ofrecer a su madre. Ahora también nosotros pondremos rostro cuando recemos el Ave María y ella nos va a reconocer cuando la pidamos que: "Ruegue por nosotros ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén".
Texto: Félix Garrido Gil - Fotos: Félix Perona García
A través de estos links se puede revivir en fotos momentos señalados de la hermosa visita:
Bordado del manto
Salida de la Virgen hacia Paterna
Recibimiento de la Virgen en Paterna
Misa con niños
Visita al Real Monasterio de Santa Catalina de Siena
Visita al cementerio
Bendicicion del monumento al inicio del Camino
Mascletá con la Virgen en el Parque Central
Eucaristía solemne de despedida