Cáritas: recibir y dar

Para un cristiano sentir la Navidad es dar acogida a un Dios que llega, al tiempo que remedia las necesidades de los que piden ayuda. La parroquia durante el tiempo de Adviento , nos ha preparado con la oración para recibir al Niño Dios, y a través de la limosna dar a conocer al necesitado que también para él es Navidad.

Presentamos en esta noticia dos momentos de esa valiosa limosna: recibir y dar.

 

Cáritas de Paterna y el ejército

Son ya varios los años que una furgoneta con matrícula ET. aparca en la sede de Caritas de Paterna para entregar cajas de alimentos y ropa procedente de los profesionales destinados en el Acuartelamiento Daoiz y Velarde en Paterna. La unión existente entre el Ejército, el Cristo de la Fe y la Villa, data de muy antiguo y forma parte importante de la historia de la Villa. 

Los más veteranos recuerdan cómo los domingos se abrían las puertas del cuartel para oír "la misa de los militares"; las colas de los paterneros más necesitados que esperaban el reparto del "rancho"; el recorrido en formación que hacían a los "Monumentos del Jueves Santo". Más reciente resuenan los traslados en procesión de la imagen de Cristo de la Fe al acuartelamiento, y la acogida con los máximos honores de los militares. 

Cercana la Navidad estos recuerdos siguen aflorando y las bolsas que se reparten hoy en Caritas no solo están repletas de comida y ropa sino también de unos sentimientos vestidos de caqui y nacidos en el cuartel de Paterna.

Las bolsas llegan a destino

Las iniciativas de " Bolsa y Manta", del "Mercadillo Solidario", de la "operación Kilo " de colegios y cuarteles, de los "anónimos generosos" ha sido posible que la Caritas parroquial haya podido llenar 60 bolsas repletas de alimentos y turrones.

Los voluntarios de Caritas abrieron las puertas del Parroquial y sin mirar a razas y colores , fueron entregando las bolsas y no solo a los "habituales" sino a todos que hacían "la cola", y a los que " les había mandado el padre Juan ".

En nombre de la Parroquia, y de los voluntarios de Caritas, gracias por vuestras oraciones y limosnas.

¡Que el Niño Dios os lo premie!

 

Textos y fotos: Félix Garrido Gil